Conflicto Irán-Israel-EE.UU. se intensifica: bombardeos, misiles y crisis humanitaria

La tensión en Medio Oriente ha llegado a niveles alarmantes. En el día 11 del conflicto, Israel intensificó sus ataques sobre Irán, bombardeando importantes objetivos militares, como la famosa prisión de Evin en Teherán y varias bases aéreas, donde destruyó al menos 15 aeronaves. Usaron más de 50 aviones y alrededor de 100 bombas para atacar instalaciones estratégicas del Cuerpo de Guardianes de la Revolución.

En paralelo, Estados Unidos se unió al conflicto directamente, lanzando la operación «Midnight Hammer», en la que bombardeó tres instalaciones nucleares iraníes: Fordow, Natanz y Esfahan. Estas acciones incluyeron el uso de misiles Tomahawk y bombas especiales capaces de destruir estructuras subterráneas.

Como respuesta, Irán disparó misiles balísticos hacia ciudades israelíes como Ashdod y Haifa. Aunque el sistema antimisiles de Israel logró interceptar la mayoría, algunos misiles lograron impactar, aunque sin causar grandes víctimas.

El conflicto ha generado consecuencias graves: más de 950 personas han muerto en Irán, muchas de ellas civiles. Además, el gobierno iraní prácticamente ha cortado el acceso a internet en todo el país, y miles de personas están huyendo de Teherán hacia zonas más seguras. La situación ha elevado los precios del petróleo y ha obligado a varias aerolíneas a evitar el espacio aéreo de la región.

A nivel internacional, varias potencias como Japón, Rusia, China y la Unión Europea han pedido calma y negociaciones, pero por ahora el conflicto continúa escalando, con riesgos de extenderse más allá de las fronteras actuales.